Ketotorrijas

Elaboración

Elaboración del pan

• Precalienta el horno a 180º.
• En un bol, mezcla la harina de linaza, la harina de almendra, una cucharadita colmada de polvo de hornear y el Ketocal. Mézclalo todo muy bien y resérvalo.
• Deshaz la mantequilla en el microondas y bátela.
• Vierte el huevo batido y la mantequilla en el bol con la mezcla de harinas. Remuévelo todo muy bien y añade 1 cucharadita de sacarina líquida y el agua.
• Echa todo el contenido en un molde de silicona de plumcake untado ligeramente con aceite.
• Ponlo en el horno durante unos 30 minutos o hasta que, al introducir un palillo, salga limpio.

Para preparar las torrijas hay que dejar que se enfríe completamente el pan. Incluso es mejor utilizarlo al día siguiente.

Elaboración de las torrijas 

• Corta el pan en rebanadas de unos 2 centímetros (saldrán unas 11 rebanadas) y distribúyelas en una bandeja o plato grande.
• Diluye los 10 gramos de Ketocal en una parte del agua. 
• Mezcla el Ketocal, la nata líquida y el resto del agua en una cazuela. Añádele un trozo de piel de limón, un trozo de piel de naranja y un palo de canela.
• Ponlo a fuego lento durante unos minutos, sin dejar de remover. Una vez haya arrancado el hervor, retira la cazuela del fuego, deja que se temple la “keto-nata” y mezcla dos o tres cucharaditas de sacarina líquida (en función de si te gusta más o menos dulce).
• Seguidamente vierte la leche sobre las rebanadas de forma bien distribuida, hasta que estén bien empapadas.
• Bate el huevo y ves pasando rebanada por rebanada por el huevo. Fríelas en abundante aceite de girasol, que debe estar muy caliente. Con la ayuda de dos tenedores ves dando la vuelta a las rebanadas para que se queden doraditas de ambos lados.
• Retíralas del aceite y ponlas sobre papel de cocina absorbente. Cuando se haya quitado el exceso de aceite, vuelve a ponerlas en el plato donde las empapaste con la “keto-nata”, ya que siempre quedará algo de esta en el plato y viene bien para que cojan más humedad.
• Espolvoréalas con canela en polvo en el mismo plato y añade la piel del limón, de la naranja y el palo de la canela antes de cubrir el plato con un plástico-film para meterlo en la nevera.
• Déjalas enfriar. Están más ricas si te las comes frías.